El cómic filipino llegó a la pantalla de Netflix con todo su folklore y su misterio

En el 2005, Budjette Tan y Kajo Baldisimo, crearon un cómic acerca de una detective que lidiaba con crímenes relacionados con lo sobrenatural. Así nació Trese, una historia que los llevó a poner en la página el folklore filipino y a presentar a uno de los personajes femeninos más badass que pueden encontrarse: Alexandra Trese. 

En este 2021, Trese llegó por fin a convertirse en un nuevo anime de Netflix, con Budjette Tan y Kajo Baldisimo como sus showrunners y en 6 episodios logra meternos en este mundo mágico y temible.

Manila, la capital filipina, es un lugar oscuro en Trese: cuando el sol cae, no debes demorarte en las calles, no debes equivocarte de camino, porque puedes quedar a disposición de todo tipo de criaturas y hechizos y eso puede costarte la vida. Esta es la advertencia que nos hace Alexandra Trese en el primer episodio del nuevo anime de Netflix y, con el correr de los episodios, descubrimos que tiene razón.

Como su padre antes que ella, Alexandra no solo es una detective, sino también la responsable de proteger a la humanidad y de preservar el balance entre nuestro mundo y el otro, el sobrenatural, el mágico, plagado de criaturas que están esperando la oportunidad para tomar la ventaja. 

Junto a ella lucharán el Capitán Guerrero de la policía de Manila, quien es el que le advierte sobre los casos misteriosos que se desarrollan en la ciudad para que lo ayude a resolverlos, los kambal, es decir, los mellizos Crispin y Basilio, sus guardaespaldas con poderes mágicos, y Hank, el barrendero del bar de la familia de Alexandra y su persona de confianza. 

Además, claro, también veremos en primer plano a muchas de las criaturas que conforman el folklore filipino, como los aswangs, una suerte de vampiros capaces de cambiar de forma, los tikbalang, mezcla de hombres y caballos, distintos duendes como el Nuno, un espíritu de la naturaleza que se mueve debajo de la tierra y desde allí escucha toda clase de secretos. 

Como decíamos, la advertencia de Alexandra no está de más. Episodio tras episodio ese sagrado balance, ese frágil acuerdo entre los humanos y lo sobrenatural irá resquebrajándose, trayendo el caos a Manila y obligando a Trese a replantearse todo lo que creía que sabía acerca de la magia y de sus propios orígenes. 

La serie combina elementos de terror con una animación sencilla, en la que se destaca  principalmente el trabajo sobre los fondos y paisajes, cargados de luces y neones que le dan esa estética cyberpunk a la ciudad de Manila, que contrastan muy bien con esas criaturas prácticamente ancestrales que forman parte del día a día de Trese.

Fiel a su estilo de dedicarse a producciones originales de distintas partes del mundo, Netflix trae con Trese el primer anime filipino, no solo por la historia que cuenta, tan relacionada con la cultura y el folklore del país, sino también por el cuidado en la producción, en la que casi todos los involucrados son filipinos o, al menos, tienen raíces filipinas. 

El doblaje es otro punto interesante del show, ya que cuenta con varias versiones diferentes, pero en todas se mantuvo el idioma filipino para los hechizos de los que se sirve Trese para resolver sus casos. La voz de Alexandra es, en la versión filipina, realizada por Liza Soberano, mientras que en la inglesa quedó en manos de Shay Mitchell, quien, a pesar de estar familiarizada con el idioma, tuvo que perfeccionarse para poder interpretar bien el acento. 

En la versión inglesa hay otros nombres interesantes en el doblaje, como Manny Jacinto, Matthew Yang King y Darren Criss.

A pesar de que todavía no ha habido confirmación para una segunda temporada, Trese tiene más para ofrecer. En esta primera parte, la serie cubre los primeros tres tomos del cómic, que ya tiene siete y algunos spin-offs interesantes que se llevan adelante en un blog creado por Budjette Tan. Para aquellos que hayan disfrutado de Castlevania o Devilman Crybaby, Trese es una nueva buena opción que merece una oportunidad y que nos abre la puerta a un mundo misterioso y al increíblemente rico folklore filipino.