El universo animado de DC llegó a su fin tras quince films: el cierre lo dio la película estrenada a principios de Mayo, Justice League Dark: Apokolips War, donde los héroes se unen para derrotar de una vez y para siempre a Darkseid. La estrella innegable de este final es John Constantine, quien, además, continúa siendo personificado por el mismo Matt Ryan que lo interpreta en el Arrowverse.
La historia de Justice League Dark: Apokolips War comienza con una Tierra arrasada finalmente por Darkseid, mientras que en sus cuarteles, la Liga de la Justicia, con Constantine y Zatanna incluidos, planean un contraataque en la tierra del villano. Las cosas salen rápidamente mal, muy muy mal. Darkseid está espiando todo a través de Cyborg, así que está preparado para la llegada de los héroes, que son derrotados en un nivel nunca antes visto. Constantine huye y dos años después, algunos héroes fueron convertidos en Furias y otros todavía lidian con las consecuencias de haber sido derrotados, mientras él intenta ahogar sus penas en La Tierra, junto a Etrigan.
Por supuesto, el último film del universo animado de DC volverá a llevar la batalla a Apokolips en una combinación de héroes rotos y antihéroes como Constantine o el Escuadrón Suicida. Allí deberán enfrentarse a todos aquellos que fueron convertidos y al mismísimo Darkseid. Las pérdidas serán duras: prepárate para llorar algunos caídos que no te esperas. Al mejor estilo Infinity War, Justice League Dark: Apokolips War nos da donde más nos duele llevándose consigo a algunas de nuestras figuras más queridas.
Es muy interesante que, en un universo que tiene figuras amadas por generaciones y generaciones, la clave para cerrarlo sea justamente John Constantine: es él quien le da el tono oscuro y desalentador a todo el film. Constantine, con su desprecio por lo heroico, perseguido por la culpa y los lamentos, borracho confeso y con una treta siempre bajo la manga es el que se necesita para enfrentarse al fin del mundo cuando el fin del mundo ya llegó. No porque Batman, Wonder Woman o Superman no sean claves a la hora de la pelea, sino porque solo un personaje tan oscuro como él puede pensar lo impensable en el último minuto para derrotar a Darkseid.
Pero...
El gran problema de Justice League Dark: Apokolips War es que no se mantiene en su oscuridad. El film es despiadado y terrible. Nos arrebata a héroes que jamás creímos ver caer y esa es justamente su gracia. Pero, si tienes a Flash en tu equipo, toda la tragedia que hizo que nos conmoviéramos a veces hasta las lágrimas o el espanto, puede ser borrada de un santiamén con una corrida de Barry. Esa posibilidad, que la película lanza al final, es, a mi entender, desilusionante. ¿Era necesario el final feliz?
En resumen
Justice League Dar: Apokolips War es un gran final para un universo animado que ha demostrado ser muy sólido a lo largo de sus quince films. La acción y la brutalidad están a pedir de boca en esta película y su protagonista, John Constantine, sabe llevar adelante muy bien una historia tan oscura como esta. Más allá de si el final es demasiado esperanzador para lo que se contó, la película merece la pena y los aplausos.
