Espacios amplios, una familia que se despedaza y un misterio alrededor de una isla son los elementos que los directores Kevin y Matthew McManus proponen en este film que juega al suspenso y a la amenaza latente.
En este artículo te contamos por qué esta producción independiente distribuida por Netflix titulada The Block Island Sound es una buena propuesta, pero…
Todo empieza alrededor de unos extraños sucesos en la isla que lleva el título de la película. Los peces aparecen muertos y nadie sabe la causa. A su vez, vemos cómo el padre pesquero del protagonista sufre algunas alteraciones un tanto inusuales en su comportamiento. De esa manera se nos va presentando la trama, a cuentagotas, entre planos largos y, por momentos, intensos. Este combo se cierra con la llegada de una hermana distante y su hija que intentarán recomponer las relaciones de este grupo, la familia Lynch. Sin embargo, lo que les espera a todos es un fin de sucesos extraños, fríos, oscuros e inquietantes que pondrán a prueba la confianza en la familia.
La película se mueve bajo los cánones del thriller de suspenso. Es por esto que lo que la hace interesante son los matices. En todo momento, ya desde la primera escena, sabemos que hay algo más allá de lo posible que está atentando contra la isla, que está rompiéndola. Esa fuerza de a poco se va llevando lo que queda de ese lugar y de a poco comienza a “alimentarse” de los habitantes.
Con planos largos y espaciosos que nos muestran por completo el panorama, el film esconde y devela de a poco los sucesos. Quizás haya mucha influencia de ese cine moderno en en el que lo psicológico es una fuente esencial para el comportamiento de la trama y eso por momentos hace que la narrativa se enrede un poco.
Lo que hay que destacar es la buena fotografía y la musicalización que nos impregnan del misterio.
Pero...
Esta es la cuestión: en el desarrollo total, la película deja muchos huecos o su paso apresurado de querer resolverlo todo; deja a medias situaciones que quizás hubiesen potenciado al film.
Tampoco se define a sí misma. Podemos decir que es un thriller a grandes rasgos pero por momentos, cuando incursiona en otros géneros, se parte en su narrativa y deja muchos estamentos sin funcionar.
En resumen
Podemos pensar en The Block Island Sound como una película entretenida. Sus 98 minutos de duración sus justos y necesarios. Por momentos se siente la desesperación y por otros nos vemos enredados en la disyuntiva de abandonar la película y ver otra, pero es en ese instante cuando la película se resuelve y nos deja varias preguntas en el tintero.
Una buena propuesta que no arriesga ni se la juega del todo, pero que cumple.