Pues sí: después de más de 10 años Star Trek está de regreso, y aunque estéticamente es impecable, siento que un buen cacho de su alma se perdió en esta nueva entrada de la venerable franquicia.
Antes que nada les quiero platicar que Star Trek: The Next Generation fue la primera serie que vi de forma religiosa, serializada, sin faltar uno solo de los capítulos. Amé profundamente todas las temporadas, los contextos sutiles contemporáneos, la ciencia ficción (increíble que hoy en día algunas de esas cosas se hicieron realidad) y sobre todo el mensaje de que la raza humana en verdad podía superar ese futuro apocalíptico lleno de mutantes. En ese momento Star Trek me dejaba soñar, imaginar nuevos mundos y nuevas civilizaciones desde la comodidad de mi sillón cada semana.
Como era de esperarse después vi Star Trek: Deep Space Nine, Star Trek: Voyager y por último Star Trek: Enterprise; cada una con su propia personalidad, cada una poniendo algo nuevo en la mesa.
Nota: incluso me di tiempo para ver la serie original de Star Trek. 🙂
He ido a convenciones, atracciones y básicamente soy un fan de hueso colorado sin llegar a ser fanático, pero admito que conozco perfectamente la historia de la saga y he leído todos los libros (oficiales o no). Odio la pregunta de ¿Es mejor Star Trek o Star Wars? porque al igual que el X-Box o Playstation, creo que todo cabe en el mismo mundo. ¿Quién o qué se siente en derecho de negarnos la posibilidad de disfrutar la ciencia ficción de donde sea que venga?
Ahora que he demostrado mis credenciales en el tema, les quiero advertir que tengo la mente abierta, que considero que algunos contenidos pueden cambiar, no me considero purista, pero sí considero que se debe respetar la visión original de Gene Roddenberry el cual fue muy claro con toda la filosofía de Trek: el hombre puede llegar a ser mucho mejor.
Por lo tanto, genuinamente estaba esperando con ansias esta nueva serie; estaba esperando como un pequeño niño emocionado, quería volver a sentir eso que sentía cuando cada semana veía mi show favorito; quería sentirme verdaderamente sorprendido.
Acompáñenme a ver si Star Trek: Discovery está a la altura de todos sus demás hermanos.
1 De entrada, viajando en un universo de paga
Antes queda nada, los fans se quejaron mucho de que, por primera vez en la historia de Trek, Discovery estaría en televisión de paga y no abierta, lo cual hizo que todos tengamos que contactar servicios adicionales de streaming. La verdad es que consideramos que sí es un poco caro, pero el resultado visual del show es impactante; nunca se había visto mejor en la pantalla chica (y me atrevería a decir que también en cine).
A este paso no va quedar lana para hacer nada más (Netflix, HBO, Disney, CBS)… ya párenle…
2 Rompiendo tradiciones trekkies
Situada en el universo canon clásico de Trek y no en el de las últimas películas, estamos a tan solo 10 años de la serie original y a bordo de una nave que no será el Enterprise. Además seguiremos los pasos de un oficial y no de un capitán. Obvio: eso pone de pelos parados a los fanáticos de la continuidad de fórmula de la serie… En mi caso creo que el cambio de estructura es bienvenido y le da un toque fresco, aunque como veremos a continuación eso también es un problema.
Otra crítica masiva es el cambio de look de los Klingons, los cuales lucen como una especie de insectoides romulianos. Esa es una mis molestias fundamentales, creo que debieron dejar intacto el look clásico, a lo mejor más elaborado, pero al final el clásico.
Por otro lado, un detalle muy sobresaliente es que todas las interacciones entre los Klingons son con su propio idioma; el público se entera por los subtítulos, lo cual me parece que transmite una verdadera atmósfera extraterrestre a los espectadores. En estas dos horas se habló más Klingon que en todas las demás series juntas.
3 Brutal en los efectos especiales
Una de las gracias de estar dentro de un servicio de paga es simple: PRESUPUESTO; y vaya, de verdad que se nota: los detalles de los fuselajes de las naves son especialmente hermosos, la flagship Klingon luce amenazadora, salvaje, una delicia que deja ver de manera sutil pequeños toques del diseño clásico. El espacio, los fondos cósmicos y los detalles de las naves son hermosos. Amé el cambio de color de las turbinas de la federación (ahora rojas) y, en general, la producción de ST: Discovery destruye totalmente cualquiera de los show previos, incluso las películas se quedan por debajo en cuestión de cinematografía.
La ciencia ficción de Star Trek: Discovery es más oscura, más realista que la de sus hermanas de las décadas pasadas.
La destrucción de la batalla entre La Federación y los Klingons es hermosa, épica, con muchas muertes y mostrando daño real e irreparable en las naves; se siente real y por primera vez sabes que nadie está seguro.
Y si, por lo menos el piloto está a la altura de la cinematografía de Game of Thrones. Pero tiene un problema: al igual que en episodio 1 de Star Wars, la tecnología de la serie no cuadra para nada con el periodo en el tiempo donde está ubicada, es demasiado avanzada (aunque estéticamente es hermosa).
4 Los disruptores volando en pedazos el escudo principal
Sin embargo al mismo tiempo que técnicamente es muy destacada, siento que tiene algunos fallos verdaderamente graves en el espíritu de la serie original, donde el personaje de Michael Burnham (Sonequa Martin-Green) interpreta a una comandante con pésima actitud que prefiere disparar primero y preguntar después, aplicar el pellizco vulcano a su capitán y prácticamente ser una escoria… NADA pero nada podría estar más alejado de la idea de Rodenberry: La Federación (y la humanidad) no es una institución para la guerra, es una institución para la exploración y la paz.
Por otro lado, me dio pesar no poder conocer a fondo los otros tripulantes del puente; había algunas opciones interesantes pero creo que todos terminaron por ser una especie de ‘red shirts’.
No es un capricho de este que les escribe, sino una piedra angular de toda la idea de Star Trek, la cual coloca al hombre como una raza que logró superar las mezquindades locales para convertirse en viajeros estelares, en fundadores de algo más grande. Recuerden que la serie original tiene el gran honor de ser la primera serie del mundo con un beso en pantalla entra una afroamericana y un caucásico (Kirk-Uhura), Gene Roddenberry creía ciegamente en este principio el cual es tirado por el triturador cósmico en Star Trek: Discovery.
5 Escape Pods listos
Aun si y fallando en su premisa filosófica central, Star Trek: Discovery es un evento para todos los aficionados a la ciencia ficción y un verdadero tour de force para todos los que estábamos esperando algo nuevo en la franquicia desde hace más de 10 años. De hecho la audiencia del piloto rompió récords, cosa que como fan me da gusto, ya que existe un gran grupo de personas que queremos ver más ciencia ficción de calidad en la televisión.
Si de plano no tienes ni la más mínima idea qué es Star Trek, no te preocupes, solo te tiene que gustar la ciencia ficción y todo lo demás se cuenta solo. Esperemos que esta nueva historia tenga el potencial de atrapar muchos más corazones jóvenes, tal y como lo hacía conmigo hace ya tantos años.
La temporada será de 13 capítulos, la mitad de los tradicionales de cada temporada clásica de la franquicia. Sin embargo creo que nos dejó lo suficientemente picados para querer ver cómo se va llevando la historia.
¿Y ustedes ya la vieron?