Hace 11 años fuimos testigos del final de una de las series de comedia que definitivamente marcó a la televisión y principalmente lo hizo no solo por tener en un horario estelar a un protagonista abiertamente gay y por ser precursora en tratar temas relacionados a la comunidad LGBT, sino además por el tipo de humor que siempre manejó y que nos tuvo a lo largo de 8 temporadas pegados a la televisión. Estamos hablando de Will and Grace, serie que gracias a su increíble reboot, este fin de semana estará en la contienda para llevarse un Golden Globe.
Ellos tienen la fórmula para hacer un buen revival


Fue 1998 cuando llegaron Will (Eric McCormack), Grace (Debra Messing), Karen (Meghan Mullally) y Jack (Sean Hayes) a mostrarle al mundo temas que nadie se atrevía a tocar, y lo hicieron de una manera en la que no solo nos hicieron reír, sino que también nos educaron ya que fueron precursores en mostrarnos las dificultades por las que a pesar de los años seguía atravesando la comunidad LGBT en una ciudad como Nueva York. Una serie basada en la amistad de estos 4 personajes que a pesar de todo siempre están el uno para el otro y que cuando llegó a su fin a muchos nos dejó muy tristes.
Para nuestra fortuna a raíz de un video viral en el cual volvimos a ver a todos reunidos, el equipo creativo de la serie pudo darse cuenta que el público los había extrañado y que sobre todo sus personajes seguían siendo relevantes a pesar del paso del tiempo. Después de haber sido anunciada solo como una entrega de 10 episodios se convirtió en un revival de 3 temporadas aún cuando todavía no empezaban las grabaciones.

Pero, ¿cómo regresar después de un final sólido y tratando temas que en la actualidad hemos visto en otras series? Primero fue el dejar a un lado por completo el final que habíamos visto, ya que los productores decidieron que nadie iba a estar interesado en ver cómo había seguido la historia de Will y Grace con sus respectivas parejas teniendo hijos, y segundo fue el seguir bajo la misma línea cómica sin perder su estilo, pero tratando temas de actualidad como es la situación política en Estados Unidos, cosa que vemos mucho en este revival.
Al mismo tiempo podemos ver cómo el personaje de Debra Messing toma mucha más fuerza, volviéndose una mujer con mucho más poder al momento de tomar decisiones y haciendo valer su voz, lo cual representa a todas las mujeres del mundo actualmente.

Tomando en cuenta que han pasado 11 años desde que los vimos por primera vez en pantalla era importante que los productores tomaran en cuenta que tanto los personajes como su público han crecido y por lo tanto creemos que ese es uno de los principales aciertos en este revival a diferencia de otras series, sobretodo porque realmente es un tema que podemos ver, y nos podemos identificar de alguna u otra forma. Conforme van pasando los capítulos nos damos cuenta que realmente hay muchos cambios en los personajes y que los productores, al igual que en el comienzo de la serie, no tienen miedo de tratar ningún tema; al contrario, logran hacerlo de una manera que sorprende, entretiene y deja pensando acerca del mundo en el que vivimos.
Si bien Will and Grace siempre ha sido un programa que trata temas políticos, durante sus últimas temporadas lo han hecho mucho más debido a la situación que se está viviendo; los productores afirman que es lo que la audiencia esperaría que hicieran y en los ratings se refleja.

Pero todo este éxito que nuevamente han logrado es debido a que cada uno de estos temas son tratados con el tipo de comedia que los caracteriza, que encanta y que nos hace reír siempre.
Creemos que todavía tenemos mucho Will and Grace por delante y la nominación de Debra Messing como mejor actriz en una serie de comedia o musical para la ceremonia de los Golden Globes de hoy domingo 6 de Enero de 2019 nos hace pensar que incluso esta serie está en uno de sus mejores momentos y que no siempre los revivals son una mala idea.
🙂