Ya está disponible en Amazon Prime Video la producción The Tomorrow War (La Guerra del mañana), película de ciencia ficción estelarizada y producida por Chris Pratt con un presupuesto de $200 millones de dólares. Esta es la apuesta de Amazon para convertirse en la película del verano.
La Guerra del Mañana está llena de acción, FX y viajes en el tiempo que entretienen, pero…
Dan Forester (Chris Pratt) es un padre de familia, ex militar y maestro de secundaria que es enviado junto con miles de soldados a una guerra en el futuro contra seres extraterrestres muy hambrientos que están diezmando a la población al grado de casi aniquilar a la raza humana.
Dan hace lo posible para no ir a la guerra y no abandonar a su esposa Emmy (Betty Gilpin) y su hija Muri (Ryan Kiera Armstrong); incluso limará asperezas con su padre James Forester (JK Simmons) para poder escapar de su destino. Dan logra recapacitar y finalmente accede a ser enviado 30 años en el futuro a combatir a los sangrientos aliens.
En el futuro Dan conocerá a la Comandante Romeo (Yvonne Strahovski) quien, junto con un grupo peculiar de soldados, tendrá que ejecutar una misión de búsqueda y rescate para salvar a unos investigadores que están atrapados en medio de la ciudad y que tienen en sus manos la clave para acabar con la invasión, minutos antes de que el gobierno los bombardee para acabar con la escalada alienígena.
Sin embargo, todos los esfuerzos serán inútiles y Romeo tendrá que pensar una estrategia más agresiva para salvar a la humanidad aunque ponga en peligro la vida de Dan y de todos los soldados a su cargo.
La nueva superproducción de Amazon, que originalmente se estrenaría en cines, fue adquirida por la compañía de Jeff Bezos para el estreno exclusivo en su plataforma, negociaciones que se dieron el año pasado en plena pandemia de COVID. El director encargado fue Chris McKay quien debuta dirigiendo una cinta de acción real. Antes había dirigido las exitosas The Lego Batman y su secuela. Y la razón de por qué lo escogieron es que la cinta basa gran parte de su atractivo en los efectos especiales; las recreaciones del futuro distópico y de la masiva jauría de seres extraterrestres es impresionante y seguramente lo sería más en la pantalla del cine. Las secuencias de acción están muy bien planteadas y ejecutadas para no dejar de sorprender e ir escalando hasta volverse masivas.
El diseño de los monstruos, que se va guardando durante varios minutos, no decepciona ya que estos alienígenas sí logran verse escalofriantes e indestructibles. En el sentido técnico The Tomorrow War es muy efectiva, sumando el gran score del veterano Lorne Balfe, la cinematografía de Larry Fong (The Predator) y la edición meticulosa de Roger Balton y Garret Elkins.
Pero...
La historia de Zach Dean (24 Hours to Live) se parece más a una de esas tantas secuelas de Starship Troopers que a los action flicks de Tom Cruise (con quien han comparado la cinta), y el problema radica en que el personaje de Chris Pratt parece salido de Jurassic World, Guardianes de la Galaxia o de otra de sus previas películas, nunca llega a salirse de su rango de confort ni conectar a nivel emocional. Aunque nunca deja de ser “chistoso” ni sarcástico le quita a la cinta esa capa de emocionalidad que tanto le hacía falta. Sin embargo, la buena química que llega a tener con el siempre efectivo JK “Badass” Simons logra rescatar a la producción en su parte final.
Por otro lado, el guion de Dean está lleno de chistes malos, y de frases forzadas que parecen salidas de un videojuego, pero que podrían dejarse de lado si la historia fuera realmente buena. Pero lo que habían construido en el primer acto se viene abajo con un segundo acto confuso y forzado que nos deja más preguntas que respuestas y que parece totalmente desconectado de lo ocurrido en la primera mitad. El tema del viaje en el tiempo se vuelve tan derivativo que solo complica y enreda más todo.
En resumen
The Tomorrow War (La Guerra del Mañana) es una entretenida, palomera y visualmente atractiva película de acción, y hasta ahí. Desaprovecha las grandes secuencias de acción que diseñaron al no tener ese toque emocional que ni la historia ni el protagonista (que también es el productor ejecutivo) pudieron darle.
Al final es una cinta de acción hecha “by the book” que podrá sorprender a los fans ocasionales con su parafernalia pero que en el fondo esta vacía y es una lástima.
