Mientras que su más grande competencia triunfó en el cine, DC ha sabido mantenerse, de alguna u otra manera, con el interés en el público. Su secreto, los contenidos para televisión.
Durante décadas, DC no sólo brilló en las páginas de los cómics: también marcó historia en la televisión. Con héroes, antihéroes y mundos imposibles, producciones que conquistaron a millones de fans, de diversas generaciones.
En esos años quedó demostrado que el universo DC puede expandirse mucho más allá de la gran pantalla, y que siempre se necesita cierta dirección, es por eso que muchos confían en la dirección que DC Studios está tomando en manos de James Gunn y Peter Safran.
Y es que a lo largo de sus diversas administraciones han existido series de DC que definieron la televisión y a toda una generación.
Antes de que los superhéroes dominaran la cultura pop, Smallville nos mostró la adolescencia de Clark Kent y cómo un joven de Kansas que estaba destinado a convertirse en Superman.
Con 10 temporadas, fue pionera en mezclar drama juvenil con mitología de superhéroes, fue aquí que vimos que los superhéroes tienen más historia que el derrotar a amenazas galácticas.
Tom Welling y Michael Rosenbaum se colocaron como los grandes favoritos de los fans, muestra de ello es que convención en la que se presentan es sinónimo de éxito.
Considerada una obra maestra, esta animación redefinió la estética de Batman, introdujo a Harley Quinn y dejó una huella imborrable en toda una generación. Oscura, elegante y madura, aún hoy es referencia de cómo adaptar un cómic a la televisión.
De tal manera que su creador, Bruce Timm, sigue produciendo historias como Batman: Caped Crusader.
Y no es para menos, Bruce Timm, creo lo que los fans llaman el Timmverse con series como Las Nuevas Aventuras de Batman, Superman: La Serie Animada, Liga de la Justicia y Liga de la Justicia Ilimitada.
Ya que estamos hablando de universos expandidos, no podemos ignorar el Arrowverse. La serie que empezó todo esto fue Arrow, con Oliver Queen al frente, interpretado por Stephen Amell.
La serie abrió camino a The Flash, Supergirl, Legends of Tomorrow y Batwoman. Con impulso de grandes talentos como Grant Gustin y Melissa Benoist, mientras que actores como Brandon Routh tuvieron su regreso más triunfal.
Más que una serie, Arrow fue el inicio de un universo televisivo compartido que DC explotó durante años.
La serie animada que quizá es la más amada por el fandom y aclamada por la crítica, esta animación dio protagonismo a los sidekicks y jóvenes héroes del universo DC, de manera más conectada y sutil que lo hizo Teen Titans.
Su clave del éxito fue que tenía tramas maduras, giros emocionales y un desarrollo complejo de personajes, Young Justice se convirtió en una serie de culto que demostró que lo animado también podía ser épico y profundo, a tal grado que hay quienes piden que la quinta temporada sea aprobada por James Gunn y Peter Safran.
Nadie lo esperaba, pero John Cena y James Gunn lograron que un antihéroe ridículo y brutal se convirtiera en uno de los grandes éxitos de DC en televisión. Peacemaker combina acción, sátira y corazón, logrando que un personaje secundario de The Suicide Squad terminara siendo uno de los favoritos del fandom.
La segunda temporada debutó con un gran recibimiento por parte de los fans, dejando en claro que Gunn sabe lo que hace después de Superman.
El futuro de DC en televisión apunta a seguir sorprendiendo. Creature Commandos fue el primer proyecto animado del nuevo DC Universe bajo James Gunn. Con monstruos, humor negro y acción desenfrenada, con una segunda temporada anunciada promete convertirse en la próxima obsesión de los fans.
A lo largo de los años, DC nos ha regalado mundos oscuros, brillantes y hasta absurdos en la pantalla chica, pero lo que todas estas series tienen en común es su capacidad de reinventar a los superhéroes para nuevas generaciones.
Quizás ese sea el verdadero superpoder de DC en televisión: recordarnos que incluso en los formatos más inesperados puede surgir un ícono eterno.
