Killers of the Flower Moon (Los Asesinos de la Luna), la obra maestra cinematográfica de Martin Scorsese que tomó por sorpresa al pasado año de 2023 por profundizar en los escalofriantes asesinatos de los indios Osage en las década de 1920, tiene un personaje que es más que enigmático en cuanto a lo que sucedió luego de los altercados. Hablo, obviamente, de Ernest Burkhart, magistralmente interpretado por Leonardo DiCaprio.
Luego de ver la cinta, muchos nos preguntamos sobre el destino en la vida real de Bukhart después de los juicios. Y por eso este artículo: exploremos el viaje más allá de la cinta.
Killers of the Flower Moon (Los Asesinos de la Luna) enmarca su trama en el camino de Burkhart como centro de atención de los asesinatos de Osage, erigiéndose así en la figura prominente. La película concluye con la sentencia de prisión de Burkhart. La realidad es que Ernest fue sentenciado a cadena perpetua en 1926 específicamente por su papel en la orquestación del asesinato de las hermanas de Mollie, pero aquí hay que marcar un giro curioso: 11 años después, en 1937, obtuvo la libertad condicional. Tremendo, ¿no?
Sin embargo, esto duró poco ya que 4 años después de lograr su libertad condicional fue preseo al estar implicado en un robo junto a Clara Mae Goad. ¿Su víctima? Lily Moral Burkhart, su ex cuñada. Un cuarto de siglo después, en 1966, una vez más logró convencer a la junta de libertad condicional de Oklahoma para que le concediera la libertad condicional. Pero eso no es todo, ya que su historia vuelve a tomar un giro aún más sorprendente: a Burkhart obtuvo el perdón absoluto por parte del gobernador de Oklahoma, convirtiéndolo en un hombre completamente libre
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Pero su libertad total no implicó necesariamente un nuevo comienzo. Burkhart intentó reparar lazos con su familia, en especial con Margie Burkhart, la nieta de Ernest y Mollie. La muchacha contó el intento de reconciliación Ernest, como un hombre mayor, tomando la iniciativa de visitarla a pesar de la angustia y la historia traicionera. El padre de Margie incluso le confió a Ernest tareas de cuidado de la casa durante las vacaciones familiares, pero el peso del pasado pesaba, y mucho. Por eso Margie no podía acercarse: las referencias de su abuelo le fueron contadas tan vívidamente que terminó por sentir amargura ante el ya anciano delincuente.
La vida de Ernest Burkhart, llena de giros y vueltas controvertidos, finalmente llegó a su fin el 1 de diciembre de 1986 en Cleveland, Oklahoma. Vivió hasta los 94 años y pasó sus últimos años en la búsqueda que mencioné antes, esa que tenía como eje reconectarse con su familia, transitando un viaje teñido de arrepentimiento y búsqueda de redención.
