Uno de los personajes principales del noveno episodio de Winning Time fue Spencer Haywood, pero el programa de HBO Max no te contó la verdadera historia sobre él. Así que no te preocupes, nosotros nos ocupamos.
La realidad es que la mayoría de las historias relacionadas con su adicción en el episodio son reales o están estrechamente vinculadas a hechos que sucedieron en la vida real. Haywood, como tantos otros en la década de 1980, luchó contra una fuerte adicción a las drogas. De hecho, en el libro de Jeff Pearlman, Spencer estimó que no solo el “80 por ciento” de la liga consumía cocaína en la temporada 1979-80, sino que una gran cantidad de Lakers estaban incluidos en esa cifra.
En el libro se revela que al menos la mitad de los miembros de los Lakers consumían cocaína, muchos de forma recreativa y un par peligrosamente. “La cocaína era la droga perfecta de Los Ángeles. La gente podía estar de fiesta toda la noche y, sinceramente, no creían que les hiciera ningún daño. Existía la creencia de que se podía consumir y que no era adictiva”, confesó Jeanie Buss.
La base de la historia de Haywood en el más reciente episodio es cierta, pero en la vida real su recaída ocurrió justo antes de las Finales, y todos sus compañeros sabían por qué se había quedado dormido.
Después de prometer no consumir drogas para las Finales y participar en la práctica del jueves con los Lakers, Haywood dejó las instalaciones del equipo, regresó a su casa y, desafortunadamente, volvió a caer en viejos hábitos esa noche, quedándose despierto hasta las 3 am fumando cocaína. Una vez que se dio cuenta del error que había cometido, tomó dos Quaaludes para calmarse, tratando de dormir brevemente antes de partir para la práctica.
Como era de esperar, las cosas salieron muy mal. Haywood se durmió varias veces mientras conducía hacia la arena pero, milagrosamente, llegó ileso. Sin embargo, ese fue solo el comienzo de sus problemas.
Haywood hizo todo lo que pudo para actuar con normalidad, pero se quedó dormido durante un análisis del coach y luego de la práctica, mientras estiraban. Cuando Westhead se dio cuenta de lo que ocurría, le ordenó que se fuera a casa y Spencer se enojó mucho con todos. “Traté de ser lo más comprensivo posible. No estaba tratando de hacerlo sentir como un paria. Pero, ¿qué se supone que debe hacer un entrenador cuando tienes este tipo de comportamiento? ¿Qué opción tenía?”, le dijo Paul a Pearlman.
Lo que si no ocurrió fue la pelea en el vestuario, aunque si pasó algo similar: Luego de una derrota en el Juego 2 de las Finales, Haywood regresó enojado a las duchas después de haber jugado solo dos minutos y casi se pelea con un novato llamado Brad Holland.
Momentos después, Buss, Westhead y Haywood se encontraron en privado y Spencer fue suspendido por el resto de la temporada. No hubo un momento en el que Kareem le diera a Haywood una oportunidad más, no lo encontraron fuera del Forum Club en el suelo y no hubo voto de equipo. De hecho, no había una verdadera amistad con Cap, quien confesó para el libro que a Haywood le dieron un premio mayor al que se merecía por el campeonato.
Sin embargo, la escena más delirante del episodio no fue inventada. “Dejé el Forum y conduje pensando solo en que Westhead debía morir”, dijo Haywood en el libro. Llamó a un amigo de Detroit que incursionaba en el crimen organizado y tramó un plan. Se colarían en la casa del coach por la noche y desactivarían los frenos de su automóvil.
Afortunadamente para todos los involucrados, el plan nunca funcionó, ya que la madre de Haywood se acercó a Spencer para disuadirlo de la idea. Años más tarde, Wood buscó a Westhead para hacer las paces.
Más allá de esto, Spencer Haywood luchó con éxito para que los jugadores ingresaran a la NBA después de la escuela secundaria, fue medallista olímpico, All-Star en 5 ocasiones, All-NBA en 2, y MVP y Rookie del Año de la ABA en 1970.
