How To Get Away With Murder o cómo matar y salir impune

Ya existen muchas series policiales en las que vemos cómo los abogados cambian o plantan pruebas para liberar a sus clientes, pero creo que ninguna con la dinámica que tiene How To Get Away With Murder.

La serie es sobre una abogada penal que da clases en una buena universidad (no tan prestigiosa como Hardvard) y su relación con un grupo de alumnos que luego de haber pasado una prueba que ella les impone, pasarán a ser sus pasantes. A raíz de la relación que se establece entre ellos, quedarán atrapados en un homocidio del cual todos y ninguno parece ser el culpable.

La serie toma el nombre informal que Annalise Keating (Viola Davis) le da a su cátedra. En las clases los estudiantes tienen que aprender a liberarse de prejuicios y aunque todo indique que sus  clientes son culpables, deben buscar hasta lo imposible para conseguir la inocencia y que los liberen de sus condenas.

En cada capítulo vamos a tener casos nuevos, en los que siempre habrá un giro inesperado que nos muestra que cualquiera puede liberarse de ser acusado de homicidio, si tiene para pagar un buen abogado.

Lo que me parece destacable de la serie, por lo cual la recomiendo y MUCHO es:

La serie está constantemente mostrándonos a sus personajes en acción, con un ritmo en el cual es difícil aburrirse, ya que al tener una buena dinámica, desde el guión y desde lo visual, les va a pasar que se sienten parte de lo que pasa y la intriga de quién fue el asesino, nos va a seguir aún cuando no estemos viendo la serie.

Su actriz principal, Viola Davis, ganó un Emmy a mejor actriz dramática por su actuación de Annalise Keating, así pasó a ser la primera mujer afroamericana en ganar en esa categoría. La actuación en el papel de abogada sin escrúpulos, que es capaz de recurrir a la ilegalidad para ganar sus casos, le sale a la perfección a Viola Davis: realmente nos creemos su falta de ética y su ambición por ganar. Y me parece excelente que además tenga un toque de humanidad cuando ayuda a su estudiante preferido Wes, ya que no todos los malos son realmente malos.

Luego tenemos a los asistentes de Annalise,  Bonnie (Lisa Weil) y Frank (Charlie Weber) que la acompañan en todos sus casos y decisiones, buenos o malos. Están muy bien elegidos estos dos personajes, ya que Bonnie  es la abogada que parece querer hacer todo lo correcto y Frank el asistente que se mueve en la ilegalidad para ayudar a Annalise hasta las últimas consecuencias.

Los estudiantes van a tener algunas características bastante estereotipadas, pero que con buenas actuaciones crean personajes interesantes y creíbles. Me parece muy buena la actuación de Matt McGorry (ya lo vimos en OITNB), interpretando al hijo de un juez reconocido y adinerado, que quiere ser el bromista del grupo, algo que no va a ser muy celebrado por el resto de sus compañeros.

También resalta Alfred Enoch como Wes Gibbins,  el estudiante mimado de Annalise, un chico que parece venir de clase baja y haber tenido una niñez muy traumática. A veces nos hace dudar si es tan bueno como parece o es una máscara para poder salir siempre airoso. Y las actuaciones de las chicas, Karla Souza y Aja Naomi King, no se quedan atrás: les sale muy bien el papel de chicas ambiciosas, dispuestas a todo por ser buenas abogadas.

En cada capítulo tenemos nuevos casos muy interesantes, donde nos ponen a prueba sobre la culpabilidad o no de los acusados. Nos vamos a encontrar desde una empresaria acusada de fraude, hasta un mafioso acusado de contrabandear, que al parecer esta vez realmente no estaría haciendo algo ilegal.