Para este fin de semana te recomendamos maratonear una serie que es un combo explícito, crudo y explosivo creado y producido nada más ni nada menos que por los escritores de una de las mejores series de todos los tiempos. Hablamos de David Simon y George Pelecanos, de The Wire. Creemos que esta opción es lo mejor que hicieron desde aquella obra de arte, por eso no te la puedes perder. Con ustedes, The Deuce.
The Deuce se ambienta en la ciudad de Nueva York a principios de los años setenta y cuenta el nacimiento de la industria del cine porno en el ámbito de Times Square. Es un periodo anterior al turismo masivo en la ciudad, un momento en el que esa calle constituía un reino de la prostitución y la pornografía.
La serie (The Deuce se solía denominar a este área) se centra principalmente en la vida de las prostitutas y sus proxenetas, combinado con empresarios de los bajos fondos, bares nocturnos y policías corruptos de la época. Básicamente, es la historia de quienes viven y se ganan la vida en ese vecindario, en un momento de empeoramiento de la seguridad y el comienzo de la pornografía legal. Se recorre la explotación sexual, misoginia, homofobia, racismo, corrupción cívica y jerarquía social, y cómo cada uno de estos factores es inseparable del resto.
Los dos personajes masculinos principales de la historia son los gemelos Vincent y Frankie (ambos interpretados por James Franco), dueños de un bar que funciona como una especie de lugar de reunión para muchos de los tipos humanos propuestos: desde proxenetas y prostitutas hasta policías. Vincent es un barman y empresario apurado que lucha por sobrevivir mientras su matrimonio se desmorona; Frankie es un estafador callejero cargado de deudas que molesta y divierte a su hermano constantemente. La actuación de James Franco es increíble: vas a ver a dos personas físicamente iguales pero con personalidades completamente diferentes.
La otra parte importante de la historia es la del personaje femenino de esta serie, Eileen “Candy” Merrell (Maggie Gyllenhaal), una trabajadora sexual emprendedora y sin proxeneta que ve las oportunidades de negocios que se abren en la industria de la pornografía. Eileen tiene un hijo pequeño que vive con su madre, que sabe muy bien lo que ella hace, y la señala constantemente cuando la ve. La joven es ingeniosa e inteligente, y en cada episodio puedes ver cómo funciona su cerebro. Sin dudas Gyllenhaal era la actriz adecuada para lograr la complejidad de ese personaje ya que le da todo a este papel, incluida la desnudez frecuente en los primeros episodios. A medida que la serie se desarrolla, es la narrativa de Candy la que le da a The Deuce su ventaja feminista, ya que transfiere sus habilidades al estudio de grabación de las películas porno habiendo identificado el potencial de la industria antes que nadie.
La serie también recorre la vida y el manejo turbio de un trío de proxenetas y más de una docena de prostitutas callejeras. Muestra también el manejo de los policías, mafiosos y hasta una reportera interesada en exponer a la prensa lo que sucede en ese sucio mundo. Tan pronto como conozcas a alguien como Darlene (Dominique Fishback), Ashley (Jamie Neumann), Ruby (Pernell Walker) o Lori (Emily Meade) recién llegadas al Deuce, querrás saber todo sobre ellas, incluso cómo es que terminaron enroladas en el trabajo sexual. La serie te lo va a contar sin reservarse nada.
El diseño de producción está perfectamente pensado para transportarte, por ejemplo, a esas habitaciones de hotel de 10 dólares por hora; sentirte allí con tan solo ver la basura que cubre toda la superficie de la calle. Y eso adornado en contraste con las tan populares marquesinas de teatro y un restaurante clave adecuado para reunir a casi todos los personajes en cada episodio le da a la serie un nivel inesperado… o sí.
The Deuce te dice visualmente todo acerca de las estructuras de poder de esa era: género, clase, y raza.
Y por supuesto no podemos dejar de destacar lo maravillosa que es la música en esta serie. Ya la introducción lo dice todo. Es una melodía perfecta para ilustrar las intersecciones sociológicas, políticas y económicas del programa en el mundo de ese momento. La canción es If There’s a Hell Below We’re All Going to Go de Curtis Mayfield (1970).
The Deuce ha sido renovada recientemente para una tercera y última temporada que se espera para este 9 de Septiembre. Así que ponte al día con esta joyita que pocos conocen de HBO.
🙂
