El capítulo final de la primera temporada de True Detective es una absoluta maravilla. Todo lo que tiene que decirnos el director y guionista Nic Pizzolatto se concentra en el jolgorio de locura y desenfreno que se logra con una descripción del ambiente pesada, extrema y casi sobrenatural. Tanta estimulación filosófica y literaria con Nietzsche, el nihilismo y Lovecraft merecía un final redentor. Y Pizzolatto lo escribió.
Ahora bien, sobre gustos no hay nada escrito y todo es discutible pero, independientemente del cierre de la historia, hay algo irrefutable: los logros de producción y realización. Si hay algo que cautivó a la audiencia es la utilización de la banda sonora, exquisita, que acompaña de manera perfecta las imágenes, hechos y diálogos estremecedores en True detective.
Este lugar es como el recuerdo del pueblo de alguien y el recuerdo está desvaneciéndose.
Ya viste los 8 episodios y claro, todavía no te recuperaste y el recuerdo se desvanece.
Si te preguntas cómo llenar ese vacío te propongo recorrer las canciones que escuchaste a lo largo de la serie: