El FIFA Gate no solo fue uno de los escándalos deportivos más grandes de la historia, también nos dejó declaraciones, historias, conspiraciones y fotos tanto inolvidables como ridículas. Amazon Prime Video vio en esto la oportunidad de hacer una serie y no se equivocó al presentar El Presidente.
Lo más impresionante de este caso, y la razón por la que repercutió tanto en Latinoamérica, es que muchos de los protagonistas fueron presidentes de instituciones de que conforman a la Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL): Julio Humberto Grondona (Asociación Argentina), José Ángel Napout (Asociación Paraguaya), José Jadue (Federación Chilena), Eugenio Figueredo (Asociación Uruguaya); Luis Bedoya (Federación Colombiana); Rafael Esquivel (Federación Venezolana); Luis Chiriboga (Federación Ecuatoriana) y José María Marín (Confederación Brasileña) y Nicolás Leoz, ex presidente de la misma CONMEBOL.
El caso que tenía el FBI contra ellos era por lavado de dinero, venta ilegal de entradas para partidos, coimas por derechos televisivos, fraude por medios electrónicos vinculados con la venta de derechos de transmisión, marketing y patrocinio en las competencias organizadas por la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA). Es decir, aceptaban dinero en negro por parte de confederaciones para seleccionar sedes de mundiales, copas y elegir funcionarios en FIFA. Además, recibían coimas de empresas para que los derechos televisivos de ciertos torneos pertenezcan a ellas, ISM (International Soccer Marketing) luego se encargaba de revenderlos y así conseguían los auspiciantes del torneo. En total, se habla de una cifra cercana a los 200 millones de dólares en sobornos.
El 27 de Mayo de 2015, en Zurich, horas antes a una elección presidencial de FIFA , siete dirigentes fueron detenidos: Jeffrey Webb, vicepresidente de FIFA y presidente de Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (CONCACAF); Costas Takkas, colaborador de Webb; los antes mencionados Figueredo y Esquivel; y los presidentes de las federaciones de Costa Rica y Nicaragua, Eduardo Li y Julio Rocha.
¿Y el resto? Pues parte de los dirigentes esa mañana se escaparon gracias a Eduardo Burzaco, ex CEO de Torneos, una productora argentina de contenidos audiovisual dedicada a la transmisión de eventos deportivos. Burzaco estaba allí acompañando a los dirigentes argentinos y fue alertado por un periodista del New York Times, quien ya había publicado en su página parte de la investigación. Él les avisó al resto y lograron escabullirse como si fuesen los villanos de una mala película de acción.
El FBI había llegado allí a través de Chuck Blazer, ex Secretario General de la CONCACAF y ex funcionario de FIFA. Blazer había sido acusado en 2013 de aceptar 20 millones de dólares de CONCACAF para un centro de desarrollo que pertenecía a miembros de su familia. Presionado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, se declara culpable de 10 cargos y se convierte en el “topo” del FBI en la FIFA. El hombre luego murió de cáncer en 2017.
A pesar de esto, Joseph Blatter fue reelegido pocas horas después, pero renunció cuatro días más tarde en una conferencia de prensa que quedó para la historia. El comediante Lee Nelson lanzó dólares al aire antes de que empezara a hablar y Blatter quedó inmortalizado en fotos con billetes en el aire y el logo de FIFA en el fondo.
Además, de Blazer, otra persona importante para detener a los dirigentes fue el antes mencionado Burzaco. Luego de salir de Zurich, escapó a Italia porque sabía que lo iban a venir a buscar a él por los sobornos a FIFA. Allí, pasó más de un mes siendo buscado por Interpol hasta que, gracias a los consejos de sus abogados, se entregó e hizo un acuerdo con el FBI. Se mudó a Estados Unidos como testigo protegido y declaró todos los actos ilícitos que conocía.
Sin embargo, dos de los personajes más importantes de la serie, y del escándalo, son “Don Julio” Grondona y Jadue. El primero fue el dirigente más importante de la historia Asociación del Fútbol Argentino. Estuvo 35 años como presidente y siempre resaltó el hecho de ser muy amigo de Blatter. Fue una figura muy controvertida en la AFA, odiado por muchos dirigentes y medios deportivos, pero respetado por tantos otros. El poder que tenía sobre el resto de los dirigentes era inmenso. En CONMEBOL básicamente se hacía lo que él decía. Grondona murió en 2014, antes de que pasara todo esto, por lo cual muchos afirman que era él quien tenía todo bajo control para que este escándalo no se desate.
Uno de los “controlados” era Jadue, el presidente del pequeño club Unión La Calera que de repente saltó a liderar la Asociación Nacional de Fútbol Profesional de Chile. Él era el nuevo alumno “Don Julio”, quien era muy conocido por usar la vieja táctica “yo te ayudé con esto, ahora vos me debes un favor”.
2011 Sergio Jadue llega al poder, 2012 Chile es elegido como sede de la Copa América 2015 y esa Copa iba a ser, según muchas conspiraciones, el favor que el dirigente chileno le debía a Grondona. No obstante, Chile le gana esa final a la Selección Argentina y, al mismo tiempo que eso sucedía, el FBI atrapaba a Jadue, derivando en su declaración contra el varios altos dirigentes del fútbol latinoamericano. Así, como Burzaco y Blazer, el funcionario chileno también fue clave para detener al resto de los involucrados.
A medida que las investigaciones avanzaron, más hechos turbios se dieron a conocer: un ex empleado de Torneos reconoció los sobornos de Grondona para transmitir partidos de la Selección Argentina, el abogado argentino Jorge Delhon se suicidó en 2017 luego de estar implicado en estos hechos, Michel Platini fue nombrado Presidente Interino de FIFA post-Blatter y luego fue arrestado por aceptar sobornos para elegir a Qatar como sede el mundial 2022, Blatter culpó a Infantino de ser uno de los “topos” del FBI, el secretario general de FIFA Jerome Valcke fue desvinculado por venta ilegal de entradas, Jadue se convirtió en un testigo protegido y anda haciendo papelones en Estados Unidos (como pelearse con el novio de su ex esposa).
El FIFA Gate no terminó aún, hay más de 40 dirigentes y empresarios bajo investigación, 26 de ellos ya se declararon culpables y otros esperan una sentencia firme. Pero si el FBI va profundo en estos casos, se pueden develar muchas cosas más que pasaron en Latinoamérica mientras ellos presidían las asociaciones de fútbol más importantes. Torneos, designaciones, árbitros, copas, dopings…
