Ni el anime se salvó de tener live-actions de baja calidad

Esta semana llegó a Netflix la adaptación live-action de un anime muy querido por el público, One Piece. Sorprendentemente, ha roto la maldición de las malas adaptaciones de anime, pues en redes sociales, los fans la están amando. Sobre todo, alaban la actuación de Iñaki Godoy como Luffy. Tan solo al momento de escribir este artículo, en Rotten Tomatoes tiene 82% de aprobación por parte de la crítica y 94% de aprobación por parte del público.

Pero previo al live-action de One Piece se han estrenado bastantes adaptaciones de animes que han dejado mucho qué desear. Acá te queremos contar de ocho producciones que el público y la crítica odiaron, y con justa razón.

La adaptación de Netflix lo hizo mal empezando por su elenco lleno de actores blancos cuando al anime es japonés (y muchos live-actions de la lista pasan por este blanqueamiento). Además, los fans notaron que no tenía la misma complejidad moral que el anime. Y encima de eso, las actuaciones no fueron las mejores y se cambiaron las tramas y personajes originales, incluyendo al personaje de Mía.

El problema con The Last Airbender parece ser su director. No todos son fans del cine de M. Night Shyamalan, pues tiende a ser divisivo. Y aunque parte del público apreció la acción y efectos especiales, no pasó lo mismo con la trama y la actuación del elenco. La adaptación fue calificada como “incomprensible” y “aburrida”. Además, sufrió de blanqueamiento.

No por nada esta serie fue cancelada tras su primera temporada. La adaptación de Cowboy Bebop de Netflix fue criticada por su falta de contexto así como por no ser una aventura episódica. Además, no gustó por su exceso de humor, por alejarse de la trama original y por su pésimo CGI.

Este live-action es quizás el menos querido de la lista. De nuevo tenemos blanqueamiento y es aún más raro cuando se conservan los nombres japoneses. Luego los fans se quejaron porque técnicamente no se respetó la mitología de la historia y cambiaron drásticamente la historia de origen de Goku. Todo eso sumado a un pésimo CGI y escenas de acción “involuntariamente” hilarantes.

Tal vez el principal problema de este live-action es que cambiaron de género a uno de los principales protagonistas así como la personalidad de Sebastian. Los fans la calificaron como “confusa” y “enredada”. Además de que no había química entre los protagonistas.

Si bien a nivel visual es buena al igual que la actuación de Scarlett Johansson, su casting fue toda una controversia. ¿Una mujer blanca interpretando un personaje Japonés? ¿a quién se le ocurrió que era una buena idea? Dejando de lado eso, el live-action carece de complejidad y es monótono.

Este live-action fu criticado por su CGI y VFX es que lejos de parecer subversivo es ridículo. No se le puede tomar en serio. Además los fans criticaron la lentitud de la trama así como la actuación del elenco. ¡Y ni hablar de las coreografías en las secuencias de acción y los cambios significativos de la trama!

Otra adaptación de Netflix se hace hueco en esta lista. Con Fullmetal Alchemist los fans se quejaron de la estrechez de la historia y del escaso desarrollo de los personajes. Tal vez hubiera sido mejor como serie.