Batman: la historia de su paso de las viñetas a las pantallas
Superhéroes hay muchos, y películas y series sobre superhéroes también. Sin embargo, hay uno de ellos que no es como ninguno. Llamado a veces el Caballero Oscuro, a veces el detective encapotado y también el guardián de Gotham, me refiero, claro, a Batman, el vigilante de DCCómics, la cara oscura del heroísmo, el personaje torturado que ha sabido conquistar a grandes y chicos desde hace más de 80 años.
Salido de la mente de Bob Kane y Bill FingerBatman es, junto a Superman, el sello de DC y, como tal, ha tenido varias apariciones tanto en la pantalla grande como en la chica, con mayor y menor éxito también. Revisemos su historia antes de celebrar el Batman Day.
Corría 1939 y en National Comics Publications, la editorial antepasada de DC Cómics, ya se disfrutaba del éxito de las historias que tenían a Clark Kent / Superman en la portada. Viendo allí la posibilidad de explotar el género, los editores comenzaron a pedir a sus artistas más historias de superhéroes y es así como Bob Kane, en colaboración con Bill Finger, llegó a crear a Batman.
Inspirándose en la cultura de la época, Batman, cuya contracara se llamaría Bruce Wayne, se alzó como este aristócrata, playboy, que, en secreto, en la oscuridad, llevaba adelante acciones heroicas para proteger su ciudad. Algunas de las influencias que Kane reconoció para la creación de Batman se hallan, por supuesto, con Sherlock Holmes, para su costado detectivesco, así como también en The Mark of Zorro, el western de 1920 y en The Bat Whispers, el filme de misterio de los años 30.
La primera aparición del personaje sucedió en mayo de 1939, en el número 27 de Detective Comics. En esa primera época, Batman, como héroe de acción, estaba más volcado hacia el estilo pulp, de carácter más sensacionalista y con poca reflexión moral acerca de qué tan bien o qué tan mal estaba castigar a los villanos, algo que luego, irónicamente, se convertiría en parte central del personaje.
A medida que los números de Detective Comics fueron pasando, el personaje fue creciendo, desarrollándose aún más toda su biografía y sus características, tan reconocibles hoy en día: la tragedia de sus padres en la tierna infancia, la cantidad de gadgets que hacen que sus misiones sean exitosas, el batimóvil y hasta la llegada de Robin, el sidekick infaltable.
A lo largo de las décadas el universo de Batman continuó ampliándose, agregando nuevos compañeros, como Batgirl o Batwoman, y villanos que ya son icónicos como el Joker, o el Acertijo. La popularidad del personaje supo mantenerse, variando a veces el tono para adaptarse a las nuevas épocas, pero siempre sabiendo reinventarse para estar a la altura de las circunstancias. Batman es, sin duda, un personaje versátil en el que los lectores (y los espectadores) pueden hallarse reflejados, ya que su heroísmo y su fuerza no provienen de algo sobrenatural, sino sencillamente de su deseo de hacer el bien y su compromiso (físico, monetario, etc.) para lograrlo.
Para buscar los orígenes de Batman en la industria audiovisual no tenemos que irnos muy lejos de su época de creación de los cómics. En 1940 ya circulaban seriales cinematográficos de bajo presupuesto que mostraban al guardián de Gotham junto a su compañero Robin realizando actividades heroicas.
Sin embargo, lo que se considera el verdadero comienzo de Batman en el mundo audiovisual es la serie de televisión titulada, por supuesto, Batman, que se estrenó en la década de los 60. Protagonizada por Adam West en la piel de Bruce Wayne y con Burt Ward como el joven maravilla, se trató de una versión bastante alejada a la oscuridad a la que ahora estamos acostumbrados cuando pensamos en Batman, sino más bien una versión colorida, divertida y hasta algo camp que ha quedado guardada en el corazón de todos y que, además, hasta tuvo su propia pelúcula, estrenada en 1966.
Fue también por finales de la década de los 60 y durante los 70 y buena parte de los 80 que Batman también desfiló por la pantalla chica de forma animada. En un principio, durante The Batman/ Superman Hour, un programa de CBS que consistía en cortometrajes que contaban las aventuras de Superman o Batman, incluyendo a todos los personajes de sus respectivos universos.
Luego, claro, llegó Súper Amigos, la serie de ABC animada por Hanna-Barbera. Si bien en un principio la voz del Caballero Oscuro le correspondía a Olan Soule (quien ya lo había interpretado en The Batman / Superman Hour), luego, gracias a su inmensa popularidad, el personaje le quedó también a Adam West. Aquí, Batman se encontraba no solo con Superman, sino también hacía equipo con Wonder Woman y Aquaman, entre otros.
No sería hasta 1992 que Batman volvería a formar parte de una serie animada, con Batman: The Animated Series, que lanzó a Kevin Conroy como la voz de Bruce Wayne, quien mantuvo el rol durante muchas otras animaciones como Justice League o Batman Beyond.
En cine, en cambio, Batman se tomó un tiempo más largo para volver a aparecer luego de esos seriales de los años 40. Recién en 1989, de la mano de Tim Burton, el Caballero Oscuro regresó a la pantalla grande. El encargado de ponerle el cuerpo fue Michael Keaton y la película se convirtió en todo un éxito, tanto así que desencadenó dos secuelas para las que, lamentablemente, ni Burton ni Keaton retornaron. En su lugar, llegaron el director Joel Schumacher y Val Kilmer, quien se puso el traje del hombre murciélago, para luego cedérselo a un olvidable George Clooney.
Sin embargo, cuando hablamos de Batman en cine y aunque la película de Tim Burton de 1989 es considerada por muchos como una de las mejores, hay una trilogía que destaca entre otras. Hablo, claro, de la obra que llevaron adelante Christopher Nolan con Christian Bale. Fue en el 2005 que estrenó la primera entrega, Batman Begins, mientras que la segunda (y quizás la más celebrada), The Dark Knight, llegó en el 2008. La última parte, The Dark Knight Rises, se estrenó en el 2012.
Luego de la gloria que significó el trabajo de Nolan y de Bale, el traje ha pasado a las manos de Ben Affleck y, más recientemente, a Robert Pattinson, quienes lucharon y luchan contra los altos estándares que la trilogía pasada dejó.
Claro que no son los únicos Batman que existen: en televisión, por ejemplo, en los últimos años lo hemos visto en su versión adolescente, interpretado por David Mazouz en la serie Gotham, que muestra la historia de la ciudad antes de la aparición de su héroe, o porIain Glen, en una versión más longeva, en la serie Titans, que se centra en la historia de Dick Grayson. Incluso Kevin Conroy logró salir de detrás de la animación para una breve aparición como el Batman del Arrowverse en el crossoverCrisis on Infinite Earths.
En animación, en cambio, además de Kevin Conroy, quien siguió con su rol casi hasta sus últimos días, podemos encontrar a otros grandes actores como Ben Mackenzie, William Baldwin, Jason O’Mara y Jensen Ackles. En el mundo de Lego, en cambio, la voz del Caballero Oscuro le pertenece al canadiense Will Arnett, quien ya lleva tres películas en su haber interpretándolo.
Como decía en un comienzo, más de 80 años han pasado desde la primera aparición de Batman como personaje de viñetas. Las décadas y quienes se fueron haciendo cargo del personaje fueron transformando a este superhéroe que comenzó como un mero aristócrata que se vuelca a hacer el bien luego de una tragedia para convertirse en un personaje complejo, en el que la lucha moral y el deseo ferviente de justicia a veces lo llevan al límite. Por suerte, estas variaciones del personaje a lo largo del tiempo hacen que, no importa quién seas, siempre haya un Batman para ti.