Quentin Tarantino es un gran director, pero no sería él mismo sin la influencia del spaghetti western, un subgénero del western que se caracterizó por su violencia explícita y personajes grises.
En 2019, en un artículo para la revista The Spectator, Tarantino dijo que Once Upon a Time in the West (1968), del director italiano Sergio Leone, fue la película que “me hizo plantearme hacer cine, la película que me enseñó cómo un director hace lo que hace, cómo un director puede controlar una película a través de su cámara”. Y sobre Leone dijo que “creo que es el más grande de todos los cineastas italianos”. Por lo que no fue casualidad que después tomara el nombre para su película Once Upon a Time in Hollywood (2019).
Pero Once Upon a Time in the West no fue la única película spaghetti western que influyó en sus trabajos. Django (1966), del director Sergio Corbucci, fue importante para la creación de Django Unchained (2012). No solo comparten el nombre, sino también varios elementos como el tipo de letra de los créditos y el tema de Django de Luis Bacalov. También hay un cameo del protagonista Franco Nero durante la escena de Mandigo.
Django no es la única película de Corbucci referenciada en Django Unchained. The Great Silence (1968) se desarrolla durante una tormenta de nieve y en Django Unchained hay una escena donde se ve al titular y al personaje de Christoph Waltz, el Dr. King Schultz, cabalgando en un entorno invernal. Además, ambas cuentan con un personaje que es alemán y cazarrecompensas.
Por otro lado, en The Hateful Eight (2015), Tarantino volvió a hacer referencia a Django con la ropa del mayor Marquis Warren (Samuel L. Jackson), pues utiliza un abrigo y bufanda de la Unión parecidos al del personaje de Franco Nero. También podemos notar cierta influencia de The Good, The Bad and the Ugly (1966), del director Sergio Leone, en las tomas a las miradas de sus personajes; The Great Silence (1968), por sus paisajes nevosos; y For A Few Dollars More (1965), también de Leone, por los personajes del coronel Douglas Mortimer y el mayor Marquis Warren, quienes son ex soldados de la Guerra Civil convertidos en cazarrecompensas.
Tarantino además tomó la música de los spaghetti western y trabajó al lado del compositor Ennio Morricone en The Hateful Eight. “La forma en que cortamos la música ahora: eliges una canción de rock y cortas la escena con esa canción. Todo empezó con Leone y Morricone, y en particular con The Good, The Bad and the Ugly“, dijo Tarantino en el mismo artículo de The Spectator.
En conclusión, el spaghetti western y, sobre todo, el director Sergio Leone fueron clave para la formación de Tarantino. Gracias a esas influencias, nos ha entregado increíbles películas westerns y nos westerns que forman parte de las listas de favoritos de muchos y muchas.