Christopher Nolan es uno de los cineastas más destacados de nuestra época, pero al igual que todo artista, también tiene sus debilidades y él parece obsesionado con el tiempo, tanto así que en muchas ocasiones esto le termina jugando en contra de sus historias.
Obviamente que cuando hablamos de villano no nos referimos exactamente a sus historias ficticias, puesto que Heath Ledger, Tom Hardy y Robert Downey Jr., por ejemplo, no son representaciones humanas del tiempo. A lo que nos queremos referir es que la manipulación del tiempo en sus películas siempre son el aspecto más criticado.
Exploremos un poco más este concepto, puesto que está presente en la mayoría de las historias de Nolan: el tiempo y la manera en la que el director decide jugar con él es una de las críticas más repetitivas que recibe. Esto vuelve a verse en Oppenheimer, donde sus idas y venidas al presente y al pasado terminó confundiendo a algunos de los espectadores.
En casi todas sus producciones el tiempo literalmente se distorsiona de alguna manera, ya sea debido a la tecnología, a algún elemento de ciencia ficción o simplemente porque él decide contar la historia de forma “desordenada”, como vimos en Oppenheimer. La narración no es lineal como en la mayoría de las películas, sino que en algún momento viajamos al pasado o al futuro para aprender más sobre los protagonistas.
En Oppenheimer, la narración principal es la de Oppie construyendo la bomba, pero cada tanto viajamos al futuro para ver el juicio que le hacen posterior al ataque nuclear a Japón y sus opiniones contra el armamento nuclear de Estados Unidos. A mí en particular no me molestó, pero entiendo completamente a aquellos a quienes les pareció un tanto confuso.
Tenet es quizás el ejemplo más extremo de esta obsesión de Nolan, ya que la historia cuenta con una tecnología que puede invertir la dirección en la que viaja un objeto en el tiempo. Esto hace que los viajes temporales sean constantes y en muchas ocasiones no entendemos en qué momento de la línea de tiempo nos encontramos. En esta película en particular, el director abusó de esta herramienta.
Por otro lado, en Inception, hay acción simultánea que ocurre en múltiples realidades diferentes en las que el tiempo fluye a diferentes velocidades. Esto suena aún más complicado que en Tenet, pero Nolan logra manejar mucho mejor este concepto en la historia.
Si seguimos indagando en la filmografía de Nolan, nos encontramos con que la dilatación del tiempo del viaje espacial de alta velocidad es un punto importante de la trama en Interestelar, y en el clímax, nuestro protagonista es arrastrado a un agujero negro y descubre que ahora existe fuera del espacio y el tiempo normales.
Incluso en los casos en que la película no se trata de un viaje en el tiempo real, Nolan presenta con frecuencia sus historias desordenadas, como es el caso de la inolvidable Memento. La película trata sobre un hombre que es incapaz de formar nuevos recuerdos, por lo que la película presenta sus escenas en orden cronológico inverso para simular cómo el protagonista experimenta la realidad.
The Prestige, Batman Begins e Inception, por su parte, comienzan en el medio y luego saltan hacia atrás para completar la historia de fondo. Esto es bastante parecido a lo que sucede en Oppenheimer. No hay nada fuera de lo normal, pero sí nos encontramos con varios flashbacks o flashforwards.
En otros lugares como Dunkirk, Nolan se abre paso entre tres historias diferentes a lo largo de su tiempo de ejecución: una tiene lugar en el transcurso de una semana, otra tiene lugar en el transcurso de un día y la otra tiene lugar en el transcurso de una hora. En cierto modo, está haciendo el mismo truco que hizo Origen, con acción simultánea donde el tiempo fluye a diferentes velocidades en diferentes historias.
Todos los grandes directores tienen sus clichés en sus historias y cosas que les gusta hacer, y en Nolan eso es el juego temporal. Ciertamente, es menos creepy que la obsesión de Quentin Tarantino con los pies de las mujeres, pero no podemos negar que es más confuso.
Lo que en un principio puede sonar como algo malo, quizás se termina convirtiendo en un factor positivo cuando tenemos en cuenta que todos estamos muy acostumbrados a ver el celular mientras miramos una película. No obstante, cuando estamos frente a una cinta de Nolan, necesitamos prestar más atención.
